VERSIONANDO

Hoy os presento mi versión de la falda tableada que tanto se vio por estos mundillos la primavera pasada. La tela la tenía desde el verano anterior esperando su turno para salir a escena, y como es tan cantosa como bonita, tenía que ser algo especial. No se el tipo de tela pero es como de tapicería, con mucho cuerpo y debe de tener algo de elastán ya que tiene una cierta elasticidad. Creo que ha sido un acierto para este tipo de prenda.

¡Toma foto sexy con moratón y todo!

Como cierres dos botones reciclados -no me acuerdo de que- y una cremallera enorme que me habían donado y ya que era tan grande la puse hasta abajo. Por supuesto le he dado unas puntadas a una altura razonable para no que no se abra entera y me quede en bragas en mitad de la calle que una ya no tiene edad ni cuerpo para ir enseñando carnes.

También le incorporé bolsillos en las costuras y en el interior de la cinturilla una goma elástica con botones como las de los niños por si adelgazaba. Que ingenua.

Y como no me daba tiempo a terminar el vestido que me estaba haciendo para la ocasión, y que guardé para terminarlo en septiembre y ahora no encuentro, así me presenté en la comunión de mi sobrino. Y os puedo asegurar que llamaba la atención.

Que pelo más largo tenía y que solazo hacía; todas la fotos están quemadísimas pero como este otoño ya no me valía no tengo mejores fotos, se siente. Y aunque llevo un mes con el estómago dado la vuelta y me he impandido un kilo y pico no es suficiente.

En fin, que me voy a ver que hay por el RUMS, y a pesar de mi tamaño aquí os dejo con una pose retorcida al más puro estilo Top-model que ya sabéis... que yo lo valgo.... Y además soy rubia.

¿Os acordáis de mis taconazos?